¡Uff! ¡Y rete uffff! Estamos a unos cuantos días de que festejemos el XLIII Aniversario de la fundación de CORREO DEL PACIFICO, y en estos 43 años en los que hemos escrito la historia de nuestros pueblos, podemos decir, como José Alfredo Jiménez: “El Dinero no se dónde se fue, pero sus aplausos, esos se irán conmigo… hasta la muerte”. Qué no podemos decir de aquél ahora lejano 22 de agosto de 1975, cuando nuestro director Arturo Flores Mejía, con tan solo 27 años de edad, ya casado y con cuatro hijos y su mujer embarazada, se enfrentó a su destino de crear un periódico que diera voz a los habitantes de los pueblos de la costa norte de nuestro estado, y con el respaldo de nuestros padres, Gabriel Flores y Doña Ramona Mejía Tapia, ambos ya fallecidos, lo apoyaron con todo en ese gran reto. Nuestra madre, quien murió apenas este pasado 23 de marzo del presente año, fue la gran impulsora para que CORREO DEL PACIFICO siga vigente a pesar de tantas adversidades que enfrentamos a diario, pero nuestro director jamás se ha rajado, y a pesar que este 28 de agosto cumple sus primeros 70 años de edad, se ve fuerte y vigoroso para seguir escribiendo, yendo adelante en lo que es su pasión, el periodismo. Luego de estos 43 años, ya no somos los jóvenes impulsivos y vigorosos, reconociendo que será sangre nueva la que venga a suplirnos, los que ya están en este medio, siendo éstos mis sobrinos Ara, Gabriel y Lucy Flores Nungaray, los que tienen tiempo incorporados a estas actividades periodísticas. No todo ha sido pura dicha, ya que en estas más de 4 décadas, hemos enfrentado un sin fin de adversidades, pero cuando hemos tenido problemas, nuestra madre siempre ha sido nuestra fuente de inspiración para superarlos, y hoy que ya no está físicamente con nosotros, este aniversario será en su honor, tal y como fueron los anteriores 42. Por ello, en nuestra próxima entrega continuaremos haciendo remembranzas de este XLIII Aniversario de la fundación de CORREO DEL PACIFICO.