Quienes tenemos este trabajo, la comunicación, prácticamente nos ha tocado ver de todo y por lo mismo, pocas cosas nos asombran e impactan, pero en días pasados, en una entrevista realizada por este servidor, la profesora Nena González, candidata a presidenta municipal de Tuxpan, no pudo contener el llanto cuando le preguntamos por los problemas que confronta actualmente este municipio.
Esa respuesta sincera que muchos tuxpeños y nayaritas hemos dado más de alguna vez en la vida, o sea llorar por la impotencia de no poder hacer nada por resolver los graves problemas que tiene nuestro estado y municipio, debiera ser tomada muy en cuenta por quienes buscan el poder para saciar ambiciones personales, sin importarles en lo más mínimo que por su culpa, se viven dramas cotidianos en la mayoría de los hogares de todos nuestros paisanos por culpa de la irresponsabilidad de las autoridades de no poner un alto a la distribución y venta descarada de droga, lo que provoca daños irreversibles a nuestros hijos y familiares, así como el que se nos deje sumidos en la mayor de las miserias porque se les hace fácil dejar sin empleo y oportunidad a quienes consideran sus enemigos; en no dar protección ni seguridad a los ciudadanos de bien, que no encuentran, por su desmedida ambición, ni siquiera una pastillas en los hospitales rurales o municipales, y que de plano, cada día estemos peor sin servicios públicos de agua potable, recolección de basura, alumbrado público, vigilancia policíaca, etc.
Dan ganas de romper en llanto cuando vemos a tantos jóvenes deambular como muertos en vida por las calles polvorientas y llenas de basura de nuestros pueblos; cuando encontramos a una joven mujer que simplemente no vive porque tiene que prostituirse para mantener a sus hijos que fueron abandonados por su padre, el que no les da un centavo, y cuando vemos a una dama de mucha edad que vive en el abandono y nadie le da ni siquiera una pastilla para mitigar el dolor que le provocan sus muchos males de salud.
Hay que llorar también cuando vemos, como ahora, que se nos impusieron candidatos en los partidos más fuertes, que hay intromisión del magisterio, gobierno del estado, funcionarios públicos y personas de mucha fortaleza económica, para que el municipio de Tuxpan sea mal gobernado por personajes sumamente voraces y caprichosos, lo que augura que habrá mayor rezago en todos los rubros, y que aun así, a los inconformes y críticos se nos perseguirá.
Habrá más represión, miseria y abandono con los malos gobernantes que se ven venir, ya que la gente bien intencionada, sincera, humilde y llena de buenos deseos para sus semejantes, como la profesora Nena González no tienen los recursos económicos suficientes para competir en la corrupción que impera en el ámbito político electoral, en el cual, se pasan por el arco del triunfo los topes de gastos de campaña y la mayoría de los candidatos “fuertes”, mantienen cercanía con la delincuencia organizada, o con la otra mafia más poderosa y peligrosa, los gobernantes corruptos.
Obviamente los ciudadanos debemos votar por las personas sinceras, nobles y llenas de buenos deseos para sus paisanos, como Nena, quien se registró por “Fuerza México”, el que no impacta en el electorado que es bombardeado constantemente por la propaganda de las alianzas y los partidos fuertes, con dinero, los que buscan los ambiciosos para lograr llegar a tener poder y mucho dinero, sin que les importe la suerte de las familias y los pueblos, a los que ven solamente como presas fáciles.
Hay que recordar, sin embargo, que los ciudadanos tuxpenses lograron terminar con la opresión que les hacía la iniciativa privada local, la que ponía a los presidentes municipales y en el proceso de 1972, se inconformaron, salieron a las calles, pidieron el apoyo de un partido hasta ese entonces desconocido, como era “El Partido Auténtico de la Revolución Mexicana” (PARM), y llevaron al gobierno a un hombre sencillo y pobre, como fue el mecánico Rafael González Zamudio, así como a un representante de la clase oprimida a la Cámara de Diputados locales, lo que bien podría suceder en esta ocasión votando por la maestra Nena, quien suple su falta de recursos económicos con su nobleza y amor por su terruño.