ADELANTE MUJERES! El triunfo de la Lic. en Educación Especial, Norma Galván Meza como Rectora de la Universidad Autónoma de Nayarit, alienta a todas las mujeres de Nayarit a seguir luchando para abrir espacios que hasta hace poco, siempre estuvieron reservados a los varones, siendo los cargos de Presidenta del Congreso, nombramiento que obtuvo por primera vez en la historia de Nayarit la diputada Alba Cristal Espinoza, y ahora el triunfo de la antes mencionada Norma Galván, los que nos  hacen soñar despiertas a muchas damas que siempre nos hemos sentido rebasadas por varones solo por el género que diferencia el sexo. Y es que si a las pruebas nos remitimos, tenemos el ejemplo de lucha y tenacidad de la líder del SUTSEM en Nayarit, Águeda Galicia Jiménez, quien es una dirigente de los trabajadores igual que el admirado y siempre bien recordado Don Emilio M. González, y que decir en lo político, donde ponemos como ejemplo a seguir a Doña Martha García, quien abrió el camino por el cual transitan ahora muchas mujeres de Nayarit que están en cargos de representación popular en la Cámara de Diputados y el  Senado de la República. En la actualidad, los municipios más importantes de nuestra entidad, Bahía de Banderas y Tepic, están administrados por damas talentosas, como es el caso de Mirtha Villalvazo y la además guapa Geraldine Ponce, a la que se le debe reconocer su belleza y atención que da a todos los ciudadanos. Ante este panorama tan prometedor para nosotras, no hay que quitar el dedo del renglón para que pronto podamos contar con una gobernadora del Estado de Nayarit, o que arribemos a la oficina de prensa del  gobierno estatal a entrevistar a una compañera periodista que ya tenga este encargo, o por qué no, a una Secretaria General de Gobierno que nos acerque, para dialogar o entrevistar, a los funcionarios que deciden el destino de los nayaritas. Porque ahora ya podemos soñar despiertas las mujeres que hasta hace pocas décadas, solo estábamos destinadas a procrear muchos hijos y  atender las labores del hogar, las que debemos decir, no acaban con el trabajo que desempeñamos muchas damas, las que ponemos el ejemplo a los varones que procrean muchos o pocos hijos, a los cuales les niegan hasta el alimento.