Fue un 18 de Marzo de 1938, cuando el presidente de México, General Lázaro Cárdenas del Río, expidió el decreto de la expropiación petrolera, quitándoles la concesión que tenían 17 compañías extranjeras, pasando este energético a ser propiedad de todos los mexicanos.
A 85 años de haber tomado esta decisión, el pueblo de México enfrenta otros muchos retos de nacionalización de infinidad de bienes de muchos otros recursos vitales para la vida moderna, entre éstos el litio y aunque suene increíble, ahora debemos ser dueños absolutos incluso del agua, recurso natural que se está agotando a nivel mundial.
Nuestros gobernantes deben ser visionarios y volver a la senda de las nacionalizaciones, de la que se apartó en el nefasto gobierno de Carlos Salinas de Gortari, personaje que se encargó que ponerlos en manos de los pode rosos países imperialistas, los que a la fecha, nos tienen con un pie en el pescuezo y de hecho, son dueños absolutos de la mayoría de los bienes de nuestra nación.
Hay que volver a recuperar muchos bienes esenciales para el desarrollo nacional, como son las carreteras, los ferrocarriles, la explotación de minas y del comercio a nivel internacional de la producción agrícola, las que nos van a volver a dar enorme fortaleza, y si para eso hay que deshacer algunos tratados internacionales, hay que iniciar los trámites de inmediato para recuperar nuestra independencia económica.
La Revolución Mexicana contemp0laba precisamente este ideal y por lo mismo los primeros gobiernos que encabeza ron los líderes de este movimiento fue en el sentido de recuperar empresas que estaban en manos de compañías y gobiernos extranjeros, siendo una etapa de éxitos y bonanza para el pueblo hasta la década de los años 70’s, pues a finales de la misma e inicios de los 80’s, tuvimos graves crisis económicas derivadas de nuestra dependencia económica del exterior.
Desde esa fecha, el gobierno y el pueblo de México ha tenido muchos problemas financieros, así como intromisión en el desarrollo de las pocas empresas nacionales que tenemos, entre éstas la del petróleo, precisamente, y la eléctrica, en la que quieren tener mayoría los empresarios que nos venden electricidad,
Se debe señalar que en 1938, la g ente humilde de nuestro país dio una participación ejemplar en la expropiación petrolera, ya que para pagar a las compañías extranjeras y que estas se retiraran sin crear más problemas, se les tuvo que pagar generosamente y para ello, la gente cooperó con lo que tenía a la mano, inlcu0os llevando aves y animales de los corrales,
En la actualidad hay que estar dispuestos a hacer lo mismo, ya que todos los connacionales debemos luchar por lograr una plena independencia del país y si para ello es necesario apretarnos el cinturón y enfrentar dificultades en la economía, no queda más remedio que hacerlo.
Porque en su lucha por tener una mejor calidad de vida, muchas naciones han llevado a cabo sacrificios enormes, incluso luchas que les han costado la pérdida de infinidad de vidas, enfrentando a países sumamente poderosos e incluso nuestro país ha dado muestras de tener enorme dignidad y no temer a nadie, tal y como ocurrió con la intervención francesa, nación que impuso a un rey, al que derrocó y fusiló el gobierno del Benemérito de las Américas, Don Benito Juárez.
Ese conflicto internacional, fue también propiciado por problemas económicos, deudas con otras naciones y en la actualidad, México sigue siendo un país pobre con enormes recursos naturales envidiados por muchos pueblos que habitan la Tierra.
Para quienes somos nacionalistas cien por ciento, nuestro país tiene todo lo necesario para ser una gran potencia en la economía, solo que tenemos el grave problema de la corrupción y la ausencia total de valor de quienes nos gobiernan para poner la cereza en el pastel y despegar como una nación fuerte y vigorosa, pues solo hay que enfrentar a quienes se han adueñado de nuestra riqueza y devolverla a los mexicanos, los que sabemos que hacer con nuestros recursos, siendo el petróleo la muestra de que podemos ser sumamente exitosos sin intervención de nadie..