8 de Enero 2016.- La tarde de este lunes sucedió un caso chusco en la ciudad de Ruiz, donde personas bien intencionadas trataron de auxiliar a un adulto mayor que vive en extrema pobreza y soledad, en vivienda donde ni siquiera tiene puerta de acceso y de donde salía un penetrante olor a cuerpo en descomposición.

Alarmados por todo esto, gente que trabaja en la calle y son vecinos de este domicilio de la calle Puebla al sur, pidieron al joven “Chemita”, un niño que deambula por la vía pública, que fuera a la dirección de seguridad pública a reportar que de una casa salía un fuerte olor a cadáver, por lo que temían que su morador, Don Ramón Lagarza, estuviera muerto en su interior, pues tenían días de no verlo salir.

Agentes municipales llevaron a “Chemita” a las oficinas del ministerio público, el que solicitó la presencia de elementos de la Policía Nayarit y la Investigadora, pidiéndoles a estos que fueran al lugar señalado acompañados por la médico forense y obviamente los acompañó una carroza de una funeraria local, la que pensó que ya había agarrado chamba.

El primero en entrar a esta casa fue el joven “Chemita”, el que llegó hasta un catre donde dormía el supuesto difunto, el que al verlo le gritó qué es lo que andaba haciendo en su domicilio, contestando el aludido que lo había mandado “Kalimán” Martínez, el que suponía que había fallecido de manera repentina y su cuerpo estaba ahí abandonado…

¡Tu y Kalimán vayan mucho a chin…%$·?=)(/!!, dijo el supuesto difunto, entrando luego los elementos de la Policía Nayarit armados y con potentes reflectores, localizando en el lugar un gato que llevaba varios días muerto, por lo que ya apestaba a carne putrefacta.

A pesar de haber sido esta una falsa alarma, los vecinos actuaron de manera solidaria a favor del anciano que creían muerto y ahora comentan que lo único que les faltó fue haber gritado a Don Ramón en su casa antes de haber hecho la gran escandalera. (El Corresponsal).