Los ciudadanos ya estamos listos para emitir nuestro voto, pues tenemos definido a los candidatos por los que vamos a votar, aunque sobran los comentarios con los que nos quieren obligar a que cambiemos de parecer, pues temen que llegue al poder su mero padre, o sea el mentado PEJE.
El cara de lajartija fresca, el panista Ricardo Anaya, debe estar en prisión, mientras que el descolorido José Antonio Meade todo mundo sabe que lleva los mismos planes del repudiado Peña Nieto y sus reformas.
Lógico es que queremos cambiar en México, que ya no es posible enfrentar tantos problemas, sobre todo el más mortal y cuulero, el de la violencia, la que se da simple y sencillamente porque el más bruto de los ex presidentes, el Felipin Calderón Hinojosa, decreto una torpe guerra en la que nosotros, el pueblo, sigue poniendo los muertos que ya suman cientos de miles.
Los mexicanos queremos también empleo, comer las tres veces del día, que haya educación, que bajen los precios de la gasolina y la energía eléctrica en las casas, que ya no la chinguen los políticos rateros, que haya honestidad y que de plano chinguen a su madre todos los ladrones políticos y los partidos.
¡Basta ya Guillermo!, resopló el viejo líder cetemista Don Emilio M. González cuando el periodista Guillermo Ibáñez le mostró una férula anal (un grano en el culo), para pedirle lo apoyara con el consabido chayote.
Así andamos ahora los mexicanos, mostramos hasta el rabo para que se nos haga justicia con la llegado del PEJE a la Presidencia de la República.