De por si el indio es volado y a luego le dan sonaja, comentan en el mercado de Tuxpan donde los comerciantes celebraron su día, esto lógicamente con el entusiasmo que le pone ahora a todo lo que sucede en ese lugar el comerciante larguirucho y descolorido de Quevedo.

Pos hagan de cuenta que este locatario era la reina de la fiesta, aunque ya lo había anticipado Mauro Olivares “El Perro de Hule” y hasta el mil amigos de “El Pilastrón”, quienes se cansaron de mentarle la madre por el facebook al aludido.

Se debe reconocer  que en esta directiva ahora hay gente que le echa ganas, se sabe organizar y se hacen bien las cosas, además que personajes como Quevedo le echan sabor al asunto.

El Mercado de Tuxpan, a pesar de la pobreza que vive el pueblo, es un ícono de esta ciudad, debiendo decir su chaparro comentarista, que esa palabreja (ícono) alude a lugar o personaje que es representativa de una comunidad o pueblo, cuando menos en este caso de los comerciantes coqueros.

Por eso en esta ocasión no me queda más que felicitar a los locatarios del mercado de Tuxpan, y también al mitotero Quevedo, pos lo que sea de cada quien, todos se vieron muy bien en esta fiesta del día del comerciante… ¡Te doblas Quevedo!