Por tanto desorden que hay en Tuxpan, fui testigo de un hecho insólito, increíble, digno de que apareciera en el programa “Aunque Usted no lo Crea”, ya que al acompañar a una persona a recibir su cama  y colchón al Casino Ejidal, del cual unos militares sacaban los pesados y voluminosos artículos a los beneficiados del programa Bienestar y se los dejaban cerca de ese inmueble para que las gentes se los llevaran en autos o camionetas, como pudieran.

Mi amigo acercó esos artículos a una camioneta que le iba a llevar cama y colchón a su casa, al igual que a otro joven y a un vecino de la calle Corona esquina con Carranza al que apodan “El Toro”, quien es originario del poblado de Palma Grande, llevando los miliares cuatro camas y cuatro colchones cerca del vehículo, cuidando cada quien los bienes que recibía del gobierno federal.

Bastó un leve descuido del “Toro”, para que cama y  colchón desaparecieran, esto a pesar que en el lugar había decenas de personas, comenzando un alegato que llegó hasta los soldados, a quienes les reclamaron por la falta del colchón y la cama, diciéndoles los militares que ellos entregaban los bienes y que la gente al recibirlos tenían que cuidarlos y transportarlos.

Hubo gente que dijo que este robo era increíble, pues pueden sustraerle en un descuido a uno el teléfono celular o la cartera, pero una cama y colchón no era creíble, pero fue cierto.

“El Toro” pegó el grito en el cielo, dijo que haría saber de este robo a la prensa nacional, a la televisión y a los mitoteros “Gabachos”, pero por más que buscó, no recuperó esos bienes que le entregó el santo de los méndigos, Obrador.

Gente que estaba presente, dijo que esos robos ya se habían registrado con anterioridad a las afueras del Casino, que en la tierra del “Chapito Tovar”, hasta los molachos mascan rieles y el mal ejemplo cunde, así que aguas con las carteras en este gobierno de ratas…