EL OJON. “Perro que da en tragar huevos aunque le quemen el hocico”. Dicho popular mexicano.
Personaje conocido con este mote llamado el Señor Don Alfonso Ramírez Arias. Seguir leyendo LA TRINKA INFERNAL
EL OJON. “Perro que da en tragar huevos aunque le quemen el hocico”. Dicho popular mexicano.
Personaje conocido con este mote llamado el Señor Don Alfonso Ramírez Arias. Seguir leyendo LA TRINKA INFERNAL
«El Batimóvil de Pedro Inda» …..
El Batimóvil, así bautizo Joaquín «El Kiry Martinez» al automóvil negro de Pedro, aquel Ford Thunderbird modelo de los cincuentas de aquellos dónde guardaba la metralleta Juan Orol en sus películas de gangster o el que abordaban Bruno Díaz y Ricardo Roca, nombres mexicanos de Batman y Robín, era una belleza de carro, bien pintado, con todas sus luces, bien afinado y con excelente tapicería, y ya si no, siendo pertenencia de un mecánico eléctrico, pero que no desconocía la mecánica automotriz. Seguir leyendo LOS OLVIDOS DE BRAVONEL
No matarás, no robarás, no codiciarás los bienes ajenos. Quinto, séptimo y Décimo Mandamiento de la ley de Dios.
El señor Don Alonso Ramírez Arias «ALIAS EL OJON», en un tiempo trabajador del campo y cubetero de botes modelo, ahora convertido en un importante traficante de California, USA y vulgar ratero de San Vicente, Nayarit, ha pretendido lavarse su criminal pasado tratando de integrarse a la directiva ejidal disfrazado de gente honesta, ¡Válgame tamaña perversión de sujeto malandrín!. Seguir leyendo LA TRINCA INFERNAL: EL OJÓN, EL BECERRO
EL BECERRO. Dando seguimiento a las malandrinadas del dedicado maestro en mañas, el señor Don Felipe del Sagrado Corazón de Jesús Hernández Ramírez, y con el mejor de los propósitos de aciertos a la sociedad en conjunto de la perversidad de este sujeto, continuamos con nuestra exposición. Seguir leyendo LA TRINKA INFERNAL: EL OJÓN EL BECERRO Y EL TORO
Esta décima nació de una breve plática que tuve con mi sobrinieta hace quizá un año o dos, tanto me enterneció su inocencia que la capturé en versos. ……. -¿Niña y esa pecera vacía?- -Es de mi pecesito Ponyo, Tito*- -¿Se murió?- -Si, ya no nadó y se quedó en el fondo…- -¿Pero ves aquella estrella, la más brillante? Esa estrella es mi pecesito Ponyo, desde allá nos ve.- … «Ponyo» nuestro pecesito; hoy ha dejado el hogar, no ha parado de volar hacía el azul infinito. Romina con su dedito y la mirada más bella me señala: ¿Ves aquella luz parpadeando brillante? Pues de hoy en adelante… ¡Mi «Ponyo» ya es estrella! © Bravonel